Como con casi todo lo relacionado con Camboya, encontraremos cientos de opiniones al respecto en internet. Insuperable dirán unos, y un chasco dirán otros. Algo mágico o algo visto mil veces. Como todos los atardeceres y amaneceres del planeta va a depender y mucho del estado del tiempo. Si nos toca un buen día disfrutaremos de una fantástica visión de Angkor Wat y un más que posible inolvidable momento. Pero si el día no comienza con buen tiempo, lo que veremos será una visión más de este enigmático lugar. Eso sí después de darnos el madrugón. Hay que levantarse alrededor de las 4 de la mañana para ir a ver el amanecer. Cuando pongamos rumbo a los templos veremos que un buen número de tuk tuks, coches y furgonetas cargadas de visitantes han tenido la misma idea que nosotros, ver amanecer en los templos de Angkor. Y es que efectivamente no seremos los únicos que sabemos que se puede visitar Angkor Wat al amanecer. Varios miles de personas y un sinfín de vendedores ambulantes nos acompañarán durante nuestra espera y casi con toda seguridad en el momento justo de la esperada foto… alguien se cruzará delante nuestro para hacer su foto y fastidiar la nuestra.

Y ahora sin bromas, ir a ver amanecer en los templos va a depender mucho de si nos apetece darnos el madrugón, de si estamos dispuestos a estar esperando en compañía de varios miles de personas a que el sol salga y de si podremos aceptar que muy posiblemente no era el día adecuado por culpa de las condiciones meteorológicas.